Un hombre sencillo y respetuoso de las cosas de Dios, el cual vivía muy cerca de la costa, cierta tarde de primavera decidio salir a navegar con su hijo de 10 años y uno de sus amiguitos el cual tenía la misma edad. Ya encontrandose en altamar, de manera repentina se alzó un fuerte temporal que envistió violentamente contra el velero.
Lejos de la salvadora costa, y a causa de la terrible tormenta, la embarcación comenzó a hundirse, y el hombre junto a los dos niños debieron arrojarse al mar.
Una enorme ola arrojo al hombre sobre una boya de la cual logró sostenerse, y en su desesperado escape, el joven padre logro llevar consigo una cuerda, con la cual solo podria salvar a uno de los niños, los cuales luchaban por poder mantenerse a flote. Éste hombre tenía muy en claro cuánto amaba a su hijo, y daba gracias a Dios, por que el pequeño conocía a Jesucristo, pero también sabía que el otro niño no era cristiano, y que si moria en aquella catastrofe, su fin seria, seguramente, el mismo infierno. Que haría el...?
Un terrible dolor recorrió su alma y su corazón, mientras que una lagrima bajo por sus mejillas, la cual al rozar sus labios, dejo escapar un fuerte: “Te amo hijo mío” y tras decir esto, le arrojó la cuerda al otro niño quién fue salvado. Su hijo murió aquel día…
Esto mismo es lo que Dios ha hecho por nosotros al enviar a Jesus a este mundo. Él nos ha arrojado la cuerda para salvarnos, dejando morir a su propio Hijo en nuestro lugar, para que recibamos la vida eterna, la cual nos regalo solamente por amor.
Si tu aun no conoces a este jesus, el cual dio su vida por ti y por mi, te invito a que lo conozcas y sepas cuan grande a sido su amor, y cuanto estuvo dispuesto a padecer en la cruz para comprar tu salvacion y la mia. Y si tu ya eres cristiano y conoces al Señor, comienza a predicarle a otros sobre el gran amor de Dios hacia la humanidad, el cual fu revelado a traves de jesucristo, pero sin salir hablando del velero, como lo hacen los predicadores de la properidad, los cuales dan importancia a la añadidura y menosprecian, de esta manera, la importancia del sacrificio hecho en la cruz por Cristo, para darnos SALVACION Y VIDA ETERNA.
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